domingo, 19 de junio de 2011

Beautiful soul


Teoría general de las relaciones humanas; tardes de invierno que te hacen pensar

Conexiones de luz:

Esto empieza cuando yo tenía 15 años y aun no me había planteado nunca que en mi futuro sentimental existiesen chicas. Desarrollé una teoría una tarde de diciembre junto a una amiga, sentadas en su portal, que llevaba claramente implícita la posibilidad de enamorarse de alguien de tu mismo sexo; no caí en ello hasta más de un año después.

¿Qué es más poderoso, el amor o la amistad? ¿Qué es más valioso? ¿Qué puede más? Yo diría, en los tres casos, la amistad. El amor es pasional. La amistad es duradera. Sin ambos morimos. Y ambos, en realidad, son lo mismo. Cualquier amistad puede convertirse en amor. Porque lo que ambos tienen en común es el afecto por una persona. Son diferentes tipos de afecto, sí, pero la amistad puede convertirse en amor fácilmente en un momento de necesidad y a voluntad. ¿Puedes elegir enamorarte? No. Puedes elegir el hecho de cambiar una amistad por amor. Si te conviene, si le conviene, si os conviene y lo necesitáis... ¿porqué no? Hay amistades mucho más profundas y duraderas que algunos amores. No son amistades. Son amores latentes, apaciguados, que no tienen necesidad de ser reconocidos como tal, pero que, si en algún momento es necesario, saldrán en forma de amor. 
Se trata de pensar en una utopía, un mundo donde todos somos bolitas de luz en el que cada bola de luz brilla de forma distinta, con una intensidad y un brillo especiales, y en el que cada bola de luz se acerca a las que tienen afinidad con ella, a las que tienen un brillo que la atrae, bien por similar, por opuesto, por interesante, por distinto. 
Yo decidí que cada uno de nosotros lleva una bola de luz dentro. Independientemente del caparazón que lleve por encima. Y las conexiones entre bolas de luz se miden en intensidad. Todo es una misma linea que cambia de nombre conforme aumenta en grado. Entonces... ¿para qué ponerle nombre al sentimiento? Los sentimientos son eso, lo que se siente, las conexiones. No sirve llamarles amistad, amor u odio. Cada uno sabe lo que siente. Cada uno sabe lo que recibe del que lo siente.

Luego perdí la teoría, creé una lista de gente "inenamorable" y me pasé a la segunda teoría;

La Lista:

En ella decidí que la amistad era algo más importante que cualquier amor, que había amistades tan valiosas que ningún amor que pudiese tener yo en mi vida las superaría jamás. Eran demasiado valiosas como para arriesgarlas al amor (a una relación), por lo que decidí que esas, las que valía la pena conservar siempre por encima de toda pasión, eran las que iban a estar destinadas a la lista; gente con quién no valia la pena tener una relación por lo mucho que podía perder en ello.

A día de hoy no existe la lista. Puede que algún día la vuelva a necesitar y vuelva a ser partidaria de la segunda teoría, pero hoy por hoy vuelvo a creer en la primera. Son contradictorias? Un poco. Doy tumbos de una a la otra en función de la época en que esté, del punto al que haya llegado de mi vida. Y por ahora ese punto defiende la de las conexiones de luz. Ya nos veremos, lista.

K.

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